Entre semana, veo caminar a un hombre entrado en años, con una larga vida por detrás de alegrías y deshasosiegos, de nostalgias y de vidas creadas... camina con su bastón sin prisa, ya no hay prisa, su radio es su compañía y la lleva ligero a un Fiat UNO con matrícula de Barcelona, de unos 20 años el vehículo, perfectamente estacionado desde hace más de un año en el mismo lugar. Se sienta coloca su bastón en el asiento del copiloto y observa a la gente pasar, la gente le mira, es una constante durante toda la semana, sus siete días... pero no nos damos cuenta que el nos observa a nosotros... Yo le llamo el juglar de carrocería roja, y el lo permite, más no conoce este pensamiento divagante mío. Entrañable serñor juglar, le hablo desde estas líneas para que me observe y me diga que ve, cómo me ve, dónde me ve, cuándo me ve. Y yo, ¿estoy ciego?, pues le veo, pero no le veo, porque el juglar del carruaje rojo es un espejismo, quizá mi espejismo.
5 comentarios:
Jejejjeje, hazle una foto Chinlucky, preguntale que ve, dile que escucha, y porque no invitale ua una cerveza, quizá sea un hombre hambriento de compañía y lleno de conocimientos e historias.
Un fuerte abrazo maestro.
todos somos juglares sin voz
vacaaaaaaaaaaaaaa
te echo de menos bajo la lluvia irlandesa
ahh
potra
suelo caminar en silencio, en espera de que acontezca algo que me detenga, algo hermoso o terrible, si es posible contraponer belleza y dolor. hasta lo que duele, tiene una sutil gracia.
si yo tuviera un carruaje, también estaría muda, sentada en su interior, en espera de que acontezca algo que me haga salir de este caparazón.
Marcos, muchas gracias por mostrarme a este juglar de carruaje rojo. La próxima vez que vaya a tu casa espero volver a verle y esa vez no va a ver dudas vamos a ir y le vamos a preguntar qué emisora escucha, qué le parece su ciudad y sino le importa que nos hagamos unas fotos en su Fiat Uno.
Me da pena Marcos que tengas casi detenido pero no parado tu proyecto de absurdeando V&P, tus historias me llenan el corazón, así como tus proyectos.
Un abrazo Marcos.
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